Pilotados por microprocesor. Son universales y adaptados a todos los tipos de baterías del mercado: al plomo, gel o líquido. Las protecciones son generalizadas para preservar la electrónica del vehículo, el cargador y la batería contra mal utilización. Además, los modelos 15A tienen un programa de regeneración sobre 24 horas para recuperar las baterías sulfatadas.